El Ojo de Tigre es un cristal protector que aporta claridad, enfoque y fuerza interior. Ayuda a conseguir objetivos, fortalece la voluntad y revela las verdaderas intenciones. Se asocia con la energía de la Tierra y el Sol,  por lo que promueve el equilibrio entre lo espiritual y lo terrenal, entre mente y cuerpo, e integra los hemisferios cerebrales y fortalece la percepción práctica.

Estimula la autoestima, la confianza y la creatividad. Es útil para quienes luchan con la autocrítica o el miedo al fracaso. Facilita la toma de decisiones, disuelve bloqueos emocionales y ayuda a dejar de postergar. Ideal para quienes desean transformar emociones reprimidas en energía positiva.

En el plano físico, favorece la visión nocturna, mejora la garganta, órganos reproductivos y ayuda a soldar huesos. Se recomienda colocarlo sobre el plexo solar o llevarlo como pendiente.

 Ojo de Tigre Azul

También llamado “ojo de halcón”, es calmante y relajante. Es una piedra visionaria que fomenta la intuición, la percepción clara y la clarividencia. Limpia y activa el chakra del tercer ojo, y ayuda a elevarse por encima de los problemas cotidianos y ver con mayor objetividad. Libera el estrés, reduce la ansiedad y alivia la hiperactividad mental. Ideal para quienes padecen miedo, fobias o pensamientos obsesivos. En lo físico, ayuda a regular el metabolismo y calma los impulsos sexuales excesivos o frustraciones íntimas.

 Ojo de Tigre Dorado

Estimula la atención al detalle y disuelve la complacencia. Ideal para quienes necesitan concentración y disciplina. Ayuda a actuar desde la razón más que desde la emoción, y es un gran aliado en estudios, exámenes o tareas que requieren precisión.

Ojo de Tigre Rojo

Es una piedra energizante que activa el cuerpo físico y motiva a la acción. Ayuda a superar el letargo y a enfrentar la inercia emocional. Mejora el metabolismo y estimula el deseo sexual cuando está bloqueado. Excelente para revitalizar tanto el cuerpo como la voluntad.