Este colgante resguarda un lapislázuli de Afganistán, intenso como el cielo nocturno y profundo como la verdad que nace desde adentro.
Cristal de sabiduría ancestral, abre el Tercer Ojo y armoniza la expresión a través del chakra laríngeo. Invita a tomar las riendas de la propia voz, liberando bloqueos, aclarando pensamientos y despertando el poder espiritual que habita en la palabra.
Aliado del silencio consciente, enseña a hablar con claridad y a escuchar con el corazón abierto.
Protege el aura, disipa el estrés, y favorece el encuentro con guías interiores. Estimula la autoconciencia y la conexión con los sueños, revelando verdades esenciales y aportando calma serena en cuerpo, mente y espíritu.
Ideal para quienes buscan comunicar desde la verdad interna y crear vínculos desde la autenticidad.
Cierre: punto corredizo y ajustable para adaptarse con facilidad.
Material: hilo encerado Linhasita, de alta calidad, resistente y duradero.
Cuidados: se puede lavar en agua dulce. Evitar el contacto con agua salada o exposición prolongada a la brisa marina.
Solo usamos piedras naturales.
Creación artesanal tejida con ternura y presencia, pieza única.