Este colgante artesanal, tejido en micromacramé, se presenta como un talismán de presencia y viaje interno. Reúne dos fuerzas complementarias: la ágata musgo, con su conexión a la tierra, lo natural y lo visible; y la obsidiana dorada, guardiana de lo profundo, que revela lo oculto en nuestra sombra y nos protege en los procesos de transformación.
La pieza simboliza la polaridad Escorpio–Tauro, la tensión entre lo cómodo y lo incómodo, lo material y lo espiritual. Nos recuerda que la verdadera evolución se encuentra en la integración de los opuestos, en aceptar tanto lo que nutre como lo que desafía.
El ágata musgo aporta enraizamiento, claridad y calma, conectándonos con la abundancia de la naturaleza. La obsidiana dorada, en cambio, abre portales hacia lo interno, protegiendo el campo energético y revelando verdades ocultas. Juntas, se convierten en una guía para transitar el viaje del ser, con presencia y apertura a la transformación.
Cierre: punto corredizo y ajustable para adaptarse con facilidad.
Material: hilo encerado Linhasita, de alta calidad, resistente y duradero.
Cuidados: se puede lavar en agua dulce. Evitar el contacto con agua salada o exposición prolongada a la brisa marina.
Solo usamos piedras naturales.
Creación artesanal tejida con ternura y presencia, pieza única.