Este amuleto fusiona dos energías complementarias: la apatita, piedra de manifestación y visión interior, y la piedra de luna, guardiana de la intuición y los ciclos sagrados. Unidas por un tejido de macramé negro, ambas gemas dialogan entre lo espiritual y lo emocional, entre el impulso claro de la mente y la sabiduría suave del corazón.
La apatita conecta la conciencia con la materia. Estimula los dones psíquicos, profundiza la meditación y fortalece la comunicación interior. Aporta motivación, claridad y creatividad, ayudando a enfocar la energía en propósitos definidos. Disipa la confusión, libera la culpa y transforma la apatía en expresión auténtica.
Por su parte, la piedra de luna aporta suavidad, receptividad y equilibrio emocional. Es una aliada en momentos de cambio, acompaña procesos de sanación femenina y fomenta la conexión con los ciclos lunares. Protege el aura y abre la percepción sutil, despertando la intuición profunda y la sensibilidad espiritual.
Este dúo armoniza la energía del chakra de la garganta y del plexo solar, permitiendo comunicar lo que nace desde adentro con honestidad, ternura y propósito.
Un talismán para quienes desean expresarse con verdad, abrirse a la guía interior y abrazar la transformación desde un lugar luminoso.
Cierre: punto corredizo y ajustable para adaptarse con facilidad.
Material: hilo encerado Linhasita, de alta calidad, resistente y duradero.
Cuidados: se puede lavar en agua dulce. Evitar el contacto con agua salada o exposición prolongada a la brisa marina.
Solo usamos piedras naturales.
Creación artesanal tejida con ternura y presencia, pieza única.